Nos pensamos muchas veces que un perros solo es para esa etapa en la vida en la que estamos ágiles y somos más jóvenes, pero no, por lo que vamos a hablar de los beneficios que puede tener un perro para este colectivo que a veces por desgracia se encuentra en riesgo de exclusión social.
Beneficios:
1º Les ayuda a estar ocupados y sentirse útiles, ya en ocasiones se sienten inútiles y están deprimidos por esto.
2º Les obliga a moverse, ya que muchas personas no llegan a salir de casa porque "no tienen nada que hacer o dónde ir", pero con un perro... se darán sus paseos de 1 hora e incluso jugarán con el animal.
3º Les ayuda a socializarse. Quien no ha sacado a su perro y ha terminado hablando con desconocidos que tenían otros perros? Terminaran haciendo piña con otras personas mayores y organizando planes con las mismas, ya sea con o sin perro.
4º Les aporta estabilidad emocional mejorando su estado anímico. Son personas más felices por compartir el día a día con ellos, combatiendo así la tristeza o la depresión.
5º Disminuye la sensación de soledad.
6º Aumenta la seguridad en sí mismo por el desempeño de tareas sencillas y cotidianas como pasear o alimentarles.
7º Se sienten más seguros por tener un perro que conviva con ellos o les avise en caso de que pase algo.
8º MEJORA LA MEMORIA, ya que se obligan por sí solos a tener que estar pendiente del perro, de si ha paseado, si ha comido, de cuando le toca la vacuna... o de cómo se llaman sus amig@s perrunos del parque.
Son muchas las razones por las que un perro es ideal para una persona mayor, lógicamente debemos buscar el perro apropiado, no vayamos a adoptar un cachorro de 8 meses de 40 kilos hiperactivo para una persona mayor con problemas de movilidad.
En Origen Canino, hacemos terapia asistida en centros de la 3ª edad y la verdad es que nos reciben siempre con los brazos abiertos, llegándonos a decir el personal del centro que cada vez que nos vamos se nota que hemos pasado por allí porque la gente se encuentra más animada y contenta.
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